Los amortiguadores se consideran una de las partes más fundamentales de los vehículos, ya que son responsables de garantizar que estos no sufran demasiado al circular por la carretera y mantener un equilibrio adecuado en el habitáculo. Sin embargo, al ser una de las partes más importantes, también implica la necesidad de realizar revisiones periódicas para comprobar que todo sigue correctamente y no hay nada dañado. En este artículo, nos centraremos en explicar cuando cambiar los amortiguadores con detalle, con cuanta frecuencia se debe hacer y cuando revisarlos.
¿Cuándo debes cambiar los amortiguadores del coche o revisarlos?
Los amortiguadores tienen la función de soportar la carga del vehículo y absorber los impactos del terreno sin dejar de brindar comodidad a los ocupantes. También contribuyen a mantener la dirección del automóvil en buenas condiciones para una mejor toma de curvas, trabajando en conjunto con los neumáticos para garantizar una buena adherencia. Además, se encargan de mantener la alineación de las ruedas y proporcionar una altura óptima al coche.
En cuanto al momento adecuado para cambiar los amortiguadores del automóvil, es importante realizar una inspección cada 20.000 kilómetros y extender esta evaluación al resto de los elementos de la suspensión, ya que se pueden sustituir algunos elementos gastados sin necesidad de cambiar toda la amortiguación. También debes asegurarte de que no haya fugas de aceite en el amortiguador y, en caso de detectarlas, repararlas de inmediato. Es igualmente necesario verificar que no presenten óxido, especialmente si conduces en áreas donde se utiliza sal en la carretera.
Como referencia, se recomienda sustituir estos elementos cada 5 años o 60.000 kilómetros. Sin embargo, esto también dependerá de tu estilo de conducción y de la presión a la que los amortiguadores hayan sido sometidos, por ejemplo, si tu coche ha arrastrado un remolque, esto aceleraría su desgaste, si en cambio, lo has usado poco, su vida útil podría alargarse.
La clave está en las revisiones
No existe prevención mejor que la revisión. La clave para saber cuando cambiar los amortiguadores del coche es esta premisa. Si queremos evitar problemas con la amortiguación, debemos revisarla periódicamente para comprobar que todo está correcto, podemos aprovechar las revisiones pre itv, y cambiar lo que haga falta en lugar de esperar a que se rompa.
En resumen, si vas al día con las comprobaciones, se recomienda que cada 20.000 kilómetros le eches un vistazo, y cambiarlos cada 60.000 kilómetros en condiciones de uso normal.